TRASTORNOS DEL NEURODESARROLLO 2




25 de Junio 2020
Ana Lucía Peláez E. 


TRASTORNOS MOTORES


El retraso psicomotor de un niño o adolescente no es precisamente una enfermedad, sino una manifestación con relevancia clínica de patología que da origen en el sistema nervioso central, sus etimologías son multifactoriales empezando desde que puede tener una carga genética hasta factores ambientales con especial impacto en el desarrollo psicomotor del niño. La terminología DPM se usa para evaluar el desarrollo del niño en las diferentes áreas que nos revelan información acerca de esta patología como en el lenguaje, su desenvolvimiento motor, manipulativo, social, durante los primeros 24 a 36 meses; se debe especificar y delimitar qué es adquisición lenta y discriminarla de lo cualitativamente alterada, partiendo de los primeros hitos del desarrollo.

 

Para tipificar el desarrollo fuera de lo común, es necesario definir qué es lo que se conoce por tener un desarrollo motor habitual, por ejemplo: todo niño que al año y medio no dice ninguna palabra y/o no camina debe ser un signo de alarma para consultar con un profesional y descartar que exista un problema serio. Es necesario recordar recordar que mientras se detecte y diagnostique un problema en tiempos óptimos, se le garantiza al infante un mejor pronóstico. A continuación una tabla de los hitos del desarrollo regular.



Nota Importante:


Si un niño ha conseguido llegar a superar cada etapa y muestra un retroceso, es signo alarmante para atenderse por profesionales.


                            



Estático Vs. Regresivo


El término regresión psicomotriz tipifica un problema preocupante, porque el niño a demostrado avances, sin embargo al transcurrir los días ha tenido una pérdida evidente de adquisiciones ya alcanzadas, regularmente se acompañan de nuevos signos de nivel neurológico, deficitarios o poco comunes.


La separación entre el desarrollo y la regresión es difícil de englobar por su complejidad, indudablemente es un trastorno regresivo y puede tener una trascendencia marcada en el diagnóstico, tratamiento y pronóstico por lo que su abordaje debe ser preferente.


Es necesario especificar y delimitar las variaciones de la normalidad, ya que aquí también aplica en su contexto “el orden de los factores no altera el producto”, un niño puede realizar lo mismo que el promedio de una manera clara, definida y diferente, sin dificultad alguna, lo que pone en relieve su salud. A continuación algunos ejemplos de las variaciones: 


  • Pinza entre dedo pulgar y dedo medio

  • Marcha de pie saltándose la fase de gateo

  • Desplazarse sentado sobre glúteos o apoyarse en una rodilla y el otro pie de la otra extremidad o rodar sobre sí mismo

  • Rotación de cabeza

  • Dislalia fisiológica hasta los 4 o 5 años

  • Tartamudeo fisiológico entre los 2-4 años


Anticiparse a un Trastorno Motor


Me resulta importante hacer énfasis en la prematuridad la que se considera un factor de riesgo para los problemas del desarrollo y aprendizaje. El niño ingresado o encamado durante los primeros 2 años de vida puede desencadenar un retraso leve o estancamiento del área motora o bien, un déficit asociado a una patología.

 

                Todos los movimientos están regulados por el encéfalo que nos permite relacionarnos con el mundo y conocerlo mejor; para eso tenemos las principales herramientas de contacto: Brazos y piernas con las que se hace uso de la motricidad cobrando la capacidad del organismo para realizar movimientos y gestos los cuales pueden ser de mayor a menor complejidad usando los músculos adecuados que implican el movimiento. Se realizan dichos movimientos con nuestras extremidades y a esos movimientos se les denomina: Psicomotricidad fina y gruesa, temas con gran relevancia en cuanto a los trastornos motores porque allí radica el problema; consiste en una anomalía en la motricidad fina y gruesa. 


MOTRICIDAD FINA


Implica grupos musculares pequeños, especialmente los de las muñecas y dedos. Son todos los movimientos hiperfinos que se realizan como por ejemplo tocar el piano, hacer gestos, estos movimientos se van desarrollando a lo largo de toda la vida del humano, se pueden aprender nuevos movimientos a cualquier edad. 




MOTRICIDAD GRUESA 


Hacer referencia a los movimientos en que se utiliza músculos grandes. La intervención permite hacer movimientos en los que se activa todo el cuerpo o gran parte de una extremidad como por ejemplo: montar bicicleta, subir gradas, nadar. Este tipo de motricidad empieza a temprana edad, tras las primeras semanas de nacimiento se empieza a desarrollar y esa evolución es de manera continua. 

 

La dirección en la que se va perfeccionando los grupos musculares es de la cabeza a los pies, es decir primero los infantes aprenden a mover la cabeza, nuca y posteriormente tienen un mejor control sobre el tronco y finalmente se controlan piernas y brazos.

   

A continuación un pequeño video que nos explica más detalladamente acerca de la importancia de la motricidad fina y gruesa en este contexto. 




TRASTORNO DEL DESARROLLO DE LA COORDINACIÓN

 


CONCEPTO DE COORDINACIÓN


Cualquier movimiento por pequeño y fino que sea que requiera de coordinación motriz así como también aquellos movimientos que involucren una lucha contra la gravedad (equilibrio). En una acción motriz debemos distinguir entre los músculos que cobran el protagonismo y aquellos otros que desempeñan el papel de antagonistas, los que fungen como sinergistas y fijadores. 


La coordinación hace posible el ordenamiento de un trabajo muscular según Carbonero y Cañizares (como se citó en López y Garoz, 2004) la simple flexión de una falange de la mano está producida por las falanges de los dedos (músculos agonistas) y por una acción pasiva de los extensores (músculos antagonistas), es decir siempre que realicemos un movimiento se le opondrá a otro, y todo ello a su vez lo controla el sistema nervioso central, por lo que su maduración es importante para la coordinación.



Según el Señor (Morrison, 2015) en su libro Guía para el diagnóstico clínico  DSM-V indica que más o menos el Trastorno del desarrollo de la coordinación es sinónimo de dispraxia que significa dificultad para realizar movimientos ágiles a pesar de una fuerza y sensibilidad normales. Afecta al 6% de los niños de 5 a 10 años de edad, siendo los varones los más afectados. Ellos tienen dificultad para que su cuerpo se mueva en torno a lo que ellos desean; en los niños más pequeños experimentan retrasos en las metas del desarrollo entre las que se hacen mención:

  • Gatear
  • Caminar
  • Hablar 
  • Vestirse

En los niños mayores suelen ser elegidos hasta de último para equipos deportivos, porque no son capaces de: 

  • Cachar la pelota 
  • Correr 
  • Brincar
  • Patear bien
  • Pueden tener problemas para tener amigos

Otros, podrían presentar problemas para dominar las habilidades dentro del salón de clases, como colorear, escribir en letra de molde o cursiva, y cortar con tijeras. En más de la mitad de los niños podrían tener problemas mayores que incluyen deficiencias de la atención y/o aprendizaje como la dislexia. Se vincula con el trastorno del espectro autista. Las discapacidades pueden persistir durante la vida adolescente y hasta la edad adulta (Pág.43).


El sistema nervioso central debe enviar información consecuente y rápida a todos los músculos involucrados en el movimiento que se desee realizar. Es un perfecto juego entre el sistema encargado de dirigir a la persona  y el sistema encargado de moverlo. Un movimiento coordinado y equilibrado implica la interacción entre el sistema nervioso central y el sistema muscular esquelético así puede medirse perfectamente un movimiento limpio y coordinado:


  • Precisión en velocidad y dirección adecuadas
  • Eficacia en los resultados
  • Economía en el gasto energético
  • Armonía entre la contracción y relajación muscular

PROCESO EVOLUTIVO


Para hacer referencia a estas etapas Carbonero y Cañizares (Como se citó en Conde y Viciana, 2001) indican que desde la etapa infantil la coordinación se liga al desarrollo general del individuo. La percepción del medio que rodea al alumno le ayuda a construir esquemas mentales de acuerdo a su entorno más inmediato, su exploración será posible y conlleva capacidades que darán lugar al desarrollo cognitivo.


Continuando con (Carbonero Celis, 2016) los logros motores de los primeros años van puliendo su coordinación motora cada vez más y realizan movimiento más complejos al pasar el tiempo, entonces empiezan a rodar en sí mismos, a gatear, caminar, correr. Nunca es una edad temprana para trabajar la coordinación, aunque sí puede ser una edad tardía.


En las primeras edades el niño después de su nacimiento, su SNC  y la  musculatura esquelética aún no tienen relación funcional. Será indispensable los juegos infantiles para que adquieran la madurez muscular para dominar su propio cuerpo. 



TRASTORNO DE MOVIMIENTO ESTEREOTÍPICOS


 

De acuerdo con lo que plantea la organización (Mindyra, 2020) esta afección se caracteriza por un movimiento motor repetitivo, aparentemente impulsado y aparentemente sin propósito, puede ser de la mano, golpearse la cabeza, morderse o también golpear el cuerpo.

 

Los individuos pueden realizar en movimientos lesivos, entre los que se pueden mencionar movimientos del cuepor oscilantes, aleteos bilaterales o giratorios, movimientos con los dedos en la forma frontal de la cara, agitar o aletear los brazos y asentir con la cabeza. Los comportamientos autodestructivos pueden ser lesiones contra sí mismos en la cabeza, mover el torso, agitar una pequeña cuerda repetitivamente delante de la cara. Y en la vida adulta podrían volverse más severos como: morderse los labios, frotarse los ojos, morderse las uñas, además lo pueden hacer varias veces al día y la duración podría durar un minuto. Estos comportamiento impulsivos los detonan las emociones, lo que da lugar a la excitación como la felicidad, el aburrimiento, la ansiedad, la concentración en una tarea o la fatiga.

 

Existen estudios que indican que el 80% que desarrollan movimientos estereotipias motoras presentan los primeros síntomas antes de los 24 meses de edad (2 años). Es necesario detectarlos a tiempo ya que tienen como toda afección una carga emocional muy grande por el aislamiento social.

 

Los movimientos estereotipados los encontramos con frecuencia en personas con discapacidades intelectuales o en comorbilidad con el trastorno del espectro autista; entre el 4 y el 16% de las personas con discapacidad intelectual participan en estereotipias y autolesiones. EL comportamiento autolesivo se concentra en varios trastornos neurogenéticos, como el síndrome X frágil. Es habitual que los movimientos perduren durante toda la niñez y alcancen su máximo pico en la edad adolescente.

 

Estos problemas desarrollan limitaciones o dificultad en la adaptación del sujeto que la padece. Es habitual que afecten la socialización, el aprendizaje.

  

SÍNTOMAS


    Todo movimiento involuntarios coordinado y generalmente rítmico, sin propósito determinado que aparecen de manera impulsiva según (Medlineplus, 2020), los sintomas podrán ser:

1. Morderse a sí mismo

2. Apretarse las manos y agitarlas

3. Golpearse la cabeza

4. Introducirse objetos a la boca

5. Morderse las uñas

6. Mecerse, entre otros. 










TRASTORNO DE COMUNICACIÓN


COMUNICACIÓN


Etimológicamente viene del latín “Comunicare, lo que significa: compartir algo, ponerlo en común”, es un acto entre personas donde el protagonismo es la transmisión de mensajes o información.


Cuando un niño padece de una alteración motora perceptiva (auditiva-visual), intelectual o del lenguaje en la interacción social sucede un retraso en la evolución de diferentes funciones que al mismo tiempo interfiere en los procesos de aprendizaje del niño lo que conlleva una carga emocional.


La presencia de la alteración también no permite tener un feed back o interacción entre el niño y el adulto. Imaginemos un panorama que pasa en la vida real: Un niño que sea pasivo, con poca manifestación de sus necesidades más básicas, u otro escenario igual de preocupante: un niño irritable que es difícil de consolar, sin saber en realidad qué le molesta porque no puede expresarse. Es frustrante para el niño estar en los zapatos de uno de los dos escenarios, pero tambien para las personas que lo aman y que están a su alrededor. Veamos este otra situación se puede presentarse un niño con mucha intención de comunicarse con los demás, pero con un código inteligible, lo que hace que la comunicación no sea comprensiva para quienes lo escuchan.


En el DSM-V, el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales,, 5ta. Edición (20016), los trastornos de la comunicación que se enmarcan en los trastornos del neurodesarrollo se incluyen las deficiencias en el lenguaje, habla, y la comunicación, lo que a su vez engloba los siguientes trastornos:


1.    Trastorno del lenguaje (tartamudeo)

2.    Trastorno fonológico

3.    Trastorno morfológico

4.    Trastorno de la fluidez de inicio de la infancia

5.    Trastorno de la comunicación social “Pragmático”

6.    Trastornos de la comunicación no especificado


SÍNTOMAS


El inicio de los síntomas se produce en los primeros años de vida en el periodo de desarrollo, y dicha sintomatología no se explica mejor por otro trastorno.


1.    Vocabulario reducido (conocimiento y uso de palabras)


2. Estructura gramatical limitada (Incapacidad para situar las palabras y poner las terminaciones de palabras juntas para darle un orden gramatical y morfológicas)


3.  Las capacidades del lenguaje están por debajo del promedio de acuerdo a la edad del niño, lo que produce limitaciones en la comunicación eficaz, la participación social, logros académicos, y más adelante el desempeño laboral.




TRASTORNO DEL LENGUAJE


El lenguaje es una de las capacidades más importantes del ser humano, se caracteriza por codificar y decodificar la información y hacer posible la comunicación con otros seres humanos. Esa facilidad de pronunciar por medio de palabras lo que desea, gusta o disgusta, hace a la especie, seres más complejos de lo imaginado. El lenguaje es parte de nuestro instinto, ya que también está diseñado para sobrevivir, y a través de él nos hes permitido  dar un sentido completo a las emociones evocadas de miedo, angustia, pánico, y todo para resguardar la vida, expresarnos claro y sin dar lugar a suposiciones de lo que se quiere hacer. También por medio de él damos a conocer los sentimientos gratos y lo cómodo que se siente un ser, en la situación en la que se encuentra. Así pues, funciona un lenguaje bien articulado y elocuente para ser funcional; sin embargo cuando existen dificultades en el lenguaje tanto en comprenderlo, asi como tambien en emitir surgen los trastornos. 


Los trastornos del lenguaje se entiende por la dificultad o ausencia en la comprensión, expresión o repetición del lenguaje en sus diferentes aspectos que generan problemas en la adaptación del sujeto al ambiente, y/o malestar significativo. Puede también percibirse un trastorno cuando se pierde la habilidad que se había alcanzado, es decir, si existe retroceso o regresión en lo que el infante ya sabía hacer. Se ve afectado la estructura gramatical y el léxico, siendo el discurso por lo general prolijo y limitado.


                                                    


Generalmente cuando hablamos del lenguaje, lo asociamos con el habla y de hecho, si es una parte elemental del lenguaje, pero también participan otros componentes paraverbales muy interesante como el tono, la adecuación al contexto, la fluidez, la elocuencia, así como también existen los componentes no verbales como los gestos y las mímicas. Así que dicho lo anterior, son muchos los problemas que pueden surgir, por lo que derivan diferentes tipos de trastornos del lenguaje, y uno de los más importantes es la dislalia funcional o trastorno fonológico, es la dificultad de articulación; la persona que le afecta hace su comunicación poco o nada comprensible y eso conlleva la limitación en el ámbito social, por lo tanto tiene un fuerte carga emocional para padres de familia y para quien lo vive. 



EL NIÑO QUE TARDA EN HABLAR


Según (Moreno-Flagge, 2013) Empezamos por descartar las causas que no alteran la comunicación como el retraso simple del lenguaje. En este caso el niño manifiesta una comprensión y asimilación normal como los niños promedio, pero con una tardanza en desarrollar la habilidad. Puede ocurrir esto en los gemelos, otra causa podría ser el bilingüismo en la familia, pero es importante descartar también una hipoacusia, sobre todo en niños con factores de riesgo, infecciones respiratorias, otitis.


En la edad escolar el desarrollo de las funciones ejecutivas se presentan con frecuencia con un desarrollo inadecuado del lenguaje. Hay muchas formas de comunicarse que los niños van desarrollando y para tener una referencia de lo que es lo habitual, a continuación observen un infograma.



La neurociencia y la neuropsicología han confirmado dos áreas involucradas en nuestro cerebro que hacen posible la comunicación día tras día, tanto en decodificar la información que se recibe, como de emitir códigos hacia otra persona para que sean procesados; las áreas implicadas se llaman Wernicke y Broca.


El área de Broca se encuentra en el hemisferio izquierdo, más concretamente se encuentra en la parte inferior del lóbulo frontal y se encarga de producir el lenguaje, que a su vez tiene un fin: el ordenamiento de los fonemas (unidad mínima del lenguaje) en palabras y en la unión de las palabras para formar frases y oraciones.  Por otro lado, se encuentra el área de Wernicke,  responsable de la comprensión sonora y tiene la función de procesar los sonidos que escuchamos (decodificación) y relacionarlos con el habla (codificación) , la podemos encontrar en el hemisferio izquierdo, aunque las personas que son zurdas  (30%) y algunas también de las que son diestras (10%) lo tienen en el hemisferio derecho, es decir en el lóbulo temporal, está ligada a la zona auditiva; entre ellas se conectan por un grupo de fibras nerviosas conocido como el fasiculo arqueado quien lleva la información de un lado a otro para que las partes cumplan su función. 


Por lo que las personas que tienen lesiones en cualquiera de estas dos áreas, o en el fasiculo arqueado, pueden desarrollar trastornos que les afecte el habla o la comprensión del lenguaje, lo que repercutirá en su calidad de vida, es por ello que tiene relevancia clínica con profesionales de la psicología y al mismo tiempo con terapistas del habla; todo para mejorar el futuro del infante. 






 

TRASTORNO DEL SONIDO DEL LENGUAJE


Según (Child Mind Institute, 2020) los niños con trastorno del sonido del lenguaje, lo que es lo mismo a trastorno fonológico, tienen dificultades para formar los sonidos que reúnen algunas palabras. Pueden tener problemas para articular sonidos particulares, ser entendidos, calcular el volumen y sincronizar al habla, realizandolo con tartamudeo y con mucho esfuerzo. Para tener una idea más clara, veamos el siguiente corto video. 


                                                


SÍNTOMAS

  • Dificultad para coordinar el movimiento de la mandíbula, lengua y labios, que ayudan para una articulación clara

  • Dificultad para entender el habla después de los tres años de edad

  • Problemas para producir sonidos del habla específicos

  • Desarrollo del habla que retrasa a los niños en comparación con otros niños de la misma edad

  • Deficiencias en la coordinación motora de los músculos faciales, como masticar o sonarse la nariz

  • Voz ronca, áspera o nasal

  • Cambiar abruptamente el timbre o volumen de voz

  • Quedarse sin aire al habla  


 La sintomatología puede ser de orden fonético o fonológico. (Child Mind Institute, 2020)


Alteraciones fonológicas


Se caracterizan porque las personas con esta afección logra articular de manera aislada o sílaba por sílaba, pero no lo utiliza en la interacción espontánea, es decir, el individuo es capaz de producir la palabra “P” o la sílaba “PA”, e inclusive palabras o frases en sílabas, pero al momento de pronunciar la palabra completa dice “TELOTA” por  “PELOTA”  o “MACHE” por “MAPACHE” . Los errores se identifican como procesos de identificación fonológica, o retrasos. Generalmente se asocia a una alteración cognitivo-lingüística o sensorial-auditiva. (Fonoaudiólogo, 2019)

 

Alteraciones Fonéticas


Según el (Fonoaudiólogo, 2019) son incapacidades de producir sonidos según el ciclo evolutivo del infante. Esta imposibilidad es detectada desde que se emite un sonido, como tambien cuando pronuncia sílabas, palabras o conversación. Los errores son sustituciones, omisiones o distorsiones, y se asocian a déficits morfológicos (estructural) e incluso el incorrecto aprendizaje motor.


Alteraciones Fonéticas


Se altera el habla pudiendo coexistir un error fonético y varios de origen fonológico, presentandose simultáneamente (Fonoaudiólogo, 2019).




 



BIBLIOGRAFÍA

 

Morrison, J. (2015). Guía para el diagnóstico clínico. El Manual Moderno.

Carbonero Celis, C. y. (2016). Coordinación y equilibrio, concepto y actividades para su desarrollo. Wanceulen Editorial.

Mindyra. (2020). Obtenido de mindyra.com.es: https://www.mindyra.com/es-cr/solutions/adults/stereotypicmovementdisorder

Medlineplus. (02 de Junio de 2020). Obtenido de Medlineplus.gov: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001548.htm

Moreno-Flagge, N. (10 de Junio de 2013). Psyciencia. Obtenido de https://www.psyciencia.com/wp-content/uploads/2013/11/Trastornos-del-lenguaje-diagnostico-y-tratamiento.pdf

María Cristina Fernández Reuter, V. A. (2014). Comunicación aumentativa y trastornos de la comunicación y el lenguaje. Córdoba-Argentina : Editorial Brujas.

Child Mind Institute. (2020). Obtenido de childmind.org: https://childmind.org/article/informacion-basica-sobre-el-trastorno-de-los-sonidos-del-habla/

Fonoaudiólogo, F. S. (2019). Obtenido de https://franklinsusanibar.com/trastorno-de-los-sonidos-del-habla-tsh/

 

















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